Una reacción emocional que es capaz de producir en tí una respuesta física, puede ser efímera pero poderosa.
Las caricias, besos o los simples roces que aparentemente carecen de importancia, quizás para otra persona sea algo con mucho poder, que provoca escalofríos, una alegría desmesurada o una inmensa tristeza.
El tacto, el contacto físico, algo que para algunos es insignificante, para otros puede ser algo fascinante. Por esto, cuida este sentido y sobre todo, cuida la manera en que lo utilizas. Ten en cuenta que somos capaces de cambiar el estado anímico, el día o incluso la vida de alguien con tan solo una sutil caricia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario